Los derechos musicales siempre vuelven al centro de disputas legales con grandes figuras tanto, del ecosistema musical, como de la escena mundial. Donald Trump ha sido demandado por usar la icónica canción “Hold On, I’m Coming” de Isaac Hayes en sus eventos de campaña, mientras que Spotify ha ganado un juicio por los derechos de las canciones de Eminem.
En paralelo, Billy Joel está enfrentándose a una demanda por parte de un músico que reclama haber creado el ritmo de «You May Be Right», y Barry Manilow lucha contra Hipgnosis por pagos de bonificaciones no recibidos tras la venta de su catálogo musical.
🫸🏾 Donald Trump no podrá usar la música de Isaac Hayes en sus mítines
Un juez en EE.UU. ordenó a la campaña de Donald Trump dejar de usar la canción “Hold On, I’m Coming” de Isaac Hayes, tras una demanda del patrimonio del artista. Aunque el equipo de Trump afirmó que su licencia con BMI cubría el uso del tema, el hijo de Hayes, Isaac Hayes III, mantiene su postura y lucha para limitar el uso. Según la demanda, la canción ya había sido excluida de la licencia en junio, antes de su uso en la Convención Nacional Republicana. El juez también se negó a ordenar la retirada de vídeos de eventos anteriores que incluían la canción.
Pero gracias a los recientes apoyos de artistas musicales para Trump esta noticia no será un problema para su campaña.
🥠 Desestiman la demanda contra Spotify interpuesta por el editor de Eminem
Tras cinco años de una tensa batalla legal, Spotify salió victorioso en un enfrentamiento contra Eight Mile Style, la editorial que controla las canciones de Eminem. Todo comenzó en 2019, cuando la editorial acusó a Spotify de reproducir las canciones del famoso rapero sin los royalties mecánicos necesarios, lo que habría constituido una infracción de derechos de autor. Sin embargo, a pesar de que el tribunal reconoció que Spotify no contaba con estas licencias, no consideró que la plataforma fuera la culpable. La jueza Aleta A. Trauger señaló a Kobalt Music Group, la empresa encargada de gestionar los derechos de las composiciones de Eminem, como la responsable de inducir a Spotify a creer que tenía los permisos necesarios.
Mientras se desarrollaba la disputa, el caso puso al descubierto las complejidades de la gestión de derechos en la era del streaming. Spotify se defendió argumentando que había confiado en Kobalt y había pagado los royalties correspondientes a través de la Harry Fox Agency, aunque Eight Mile Style insistió en que estos pagos eran «aleatorios» e insuficientes. En medio de esta confusión, la editorial cuestionó la Ley de Modernización de la Música, que protege a servicios como Spotify de infracciones pasadas. Al final, la jueza Trauger falló a favor de Spotify, que quedó libre de cualquier responsabilidad financiera, y ordenó a Kobalt cubrir los cuantiosos costos legales. Este veredicto dejó en claro que la gestión de derechos musicales, en su enmarañada complejidad, exige mayor claridad para evitar conflictos que pueden resultar costosos tanto en términos legales como financieros.
🎹 Billy Joel demandado por un músico que dice haber ayudado a crear «You May Be Right»
El “Hombre del Piano» se enfrenta a una demanda de Joseph Roderick, que asegura haber tocado la batería en una demo de 1979 que finalmente se convirtió en el éxito «You May Be Right». Roderick afirma que se le prometieron royalties por su trabajo en la maqueta, pero nunca se le reconoció ni se le compensó. Aunque admite que no sabe si su interpretación fue usada en la versión final de la canción o si el baterista de Joel, Liberty Devitto, replicó su trabajo, Roderick sostiene que creó los ritmos y la energía del tema. Pide al menos 15 millones de dólares en daños y todos los royalties derivados de la canción.
La demanda enfrenta varios desafíos, incluyendo el tiempo transcurrido desde la supuesta infracción de derechos de autor y la falta de pruebas ya que no existe un contrato formal. Además, es común que los músicos de sesión no reciban créditos de autor o royalties, lo que podría ser utilizado en su contra por Joel y sus socios. Roderick menciona que su tardanza en presentar la demanda se debe a problemas de salud mental sufridos en los años 80, pero la reciente jurisprudencia sobre derechos de autor podría permitirle reclamar daños si logra probar sus afirmaciones.
🪤 Batalla legal en torno a compra de catálogos musicales
Hipgnosis Songs Fund adquirió los royalties discográficos mundiales de Barry Manilow en 2020. Sin embargo, la relación comenzó a temblar cuando Hipgnosis demandó al artista y su equipo de gestión por incumplimiento del contrato, descrito como un “asunto comercial rutinario relacionado con la interpretación de ciertas cláusulas de un contrato sobre pagos de bonificaciones”.
Ahora, los acusados han contraatacado con su propia demanda, reclamando 1,5 millones de dólares en bonificaciones no pagadas. Afirman que las bonificaciones debían pagarse después de que su catálogo alcanzara ciertos puntos de referencia, pero que Hipgnosis optó en cambio por «un prolongado juego del gato y el ratón para evitar esa obligación».