En la era del streaming y los conciertos en vivo, surge una pregunta crucial: ¿Existe una correlación entre el número de oyentes de un artista en una ciudad y la venta de entradas para sus conciertos? Este interrogante ha capturado la atención de la industria musical, buscando entender cómo se entrelazan estos dos aspectos fundamentales del negocio.
Según el último informe de Luminate, los streams de los artistas experimentan un aumento significativo del 42% de media cuando están de gira o participan en festivales, incluso con el simple anuncio de las fechas de la gira. Este dato revela una conexión directa entre la actividad en vivo y el consumo de música en formato digital. Ese aumento es respecto a las ocho semanas anteriores.
¿Se puede anticipar y predecir la venta de entradas a un concierto por los datos del streaming?
Uno de los grandes retos siempre ha sido poder prever cuánto va a vender un artista en un concierto o incluso cuánto podría aportar en el conjunto de un festival dentro del cartel. Esta es la la pregunta que se hacen en el informe: si estos datos de streaming pueden ser utilizados para anticipar las ventas de entradas en un mercado específico. Aunque la respuesta no es simple, el estudio de Luminate arroja luz sobre esta compleja relación.
Al analizar más de 1000 giras de este año, Luminate encontró ese porcentaje de subida de los streams y, además explica que varía según el artista y el género musical. Este incremento sugiere que existe un vínculo tangible entre el vivo y el consumo de música grabada.
Es verdad que cuando un artista está de gira, el streaming tiende a aumentar. Es importante coordinar la estrategia de distribución de la música grabada con el equipo de management y la discográfica correspondiente. Esta coordinación debe realizarse en paralelo al desarrollo de la gira o de los conciertos para aprovechar al máximo el momento.
La audiencia tiende a escuchar más al artista durante o después de un concierto, ya sea porque estuvieron presentes en el evento o porque se sienten más conectados en ese momento. Además, el impacto en las redes sociales juega un papel crucial, ya que amplifica la experiencia del concierto y la comparte con una audiencia más amplia. Esto puede contribuir significativamente al aumento de reproducciones, explicando así el incremento en el streaming, y al de venta de tickets.
Por otro lado, la relación entre el número de oyentes y las ventas de entradas no es lineal ni universal. Si bien puede haber una tendencia, factores como la popularidad local del artista, la promoción en redes sociales y la demografía del público juegan un papel crucial.
Por ejemplo, mientras algunos artistas experimentan un aumento significativo en las ventas de entradas en ciertas ciudades debido a su presencia en streaming, otros pueden no ver un impacto tan directo. Esto sugiere que la relación entre el streaming y los conciertos es multifacética y está influenciada por una variedad de factores contextuales.
Sin embargo, la industria está explorando activamente cómo aprovechar esta relación para predecir y maximizar las ventas de entradas. Al coordinar estrategias de promoción digital con las giras en vivo, los artistas y sus equipos pueden capitalizar el impulso generado por el streaming y convertir a los oyentes en asistentes a conciertos.
Conclusión
Definitivamente hay mucho trabajo por hacer en este ámbito, y aún queda mucho por explorar. Tenemos una gran cantidad de datos disponibles, los cuales son extremadamente valiosos, pero debemos aprender a interpretarlos y aprovecharlos al máximo. Además, estamos comenzando a explotar la sinergia y el potencial entre la música en vivo y la música grabada en el mundo del streaming.
Las proyecciones de crecimiento para los próximos años indican que la música en vivo seguirá creciendo significativamente, en gran parte gracias al streaming y a las redes sociales. Esta relación se ve impulsada por una idea simple pero poderosa: mientras que un artista puede llegar a una audiencia prácticamente ilimitada a través del streaming, la experiencia de la música en vivo sigue siendo única y limitada, lo que aumenta el valor percibido de las entradas o la asistencia a conciertos.
Aunque esta es una teoría prometedora, su implementación práctica depende de múltiples factores, incluyendo las características específicas de cada artista y su base de seguidores. El futuro parece dirigirse hacia un modelo que integra todas estas dimensiones, pero encontrar las estrategias adecuadas para aprovechar este potencial requerirá explorar diferentes caminos y adaptarse a cada situación particular. No hay una fórmula única para lograrlo, pero es importante comenzar a experimentar y buscar soluciones innovadoras para traducir estos conceptos en acciones concretas.
Análisis completo
Sobre este tema debatimos y lo analizamos en el nuestro podcast «El Arte del Negocio Musical«
