La empresa de live streaming Twitch adopta nuevas medidas sobre el uso de música ante el incremento de emisiones en directo de conciertos, covers, karaokes,… y una avalancha de reclamaciones de titulares de derechos. Twitch es una de las plataformas con mayor proyección ante los nuevos formatos de consumo de música en directo
En los últimos dos meses, hemos visto cómo se incrementaban exponencialmente las emisiones de música en directo a través de multitud de servicios como Instagram, YouTube o Twitch. La imposibilidad de acudir a salas de conciertos o a cualquier lugar para disfrutar de la música en compañía arrancó la creatividad de los usuarios y de otros artistas, que con ánimo de entretener y subir los ánimos comenzaron a emitir contenido, que en la gran mayoría de ocasiones hacía uso de prestaciones protegidas por los derechos de propiedad intelectual, aunque fuera de fondo o de manera complementaria a la emisión y puesta a disposición.
Desde Sympathy For the Lawyer ya apuntamos en nuestra guía legal sobre conciertos en live streaming la necesidad de gestionar autorizaciones y licencias respecto a los titulares de derechos para poner a disposición del público o para emitir un concierto en directo de obras y grabaciones fonográficas musicales. Licencias, que en algunos casos son expedidas por las entidades de gestión colectiva y en otros directamente por los titulares de derechos, y que pueden llegar a ser muy complejas, teniendo en cuenta el ámbito internacional que tienen la gran mayoría de emisiones en directo o la puesta a disposición.
Ante la queja de los titulares de derechos por la pasividad de algunas plataformas para impedir los usos de obras no autorizados, Twitch ha reaccionado tras varios avisos para la aplicación de la DMCA (Digital Millenium Copyright Act), actualizando los Términos y Condiciones de uso del servicio. La plataforma de streaming ha adoptado un protocolo para regular en qué casos se puede utilizar o no música en los videos en directo o en streaming a través de su infraestructura. Entre dichos usos autorizados se encuentran:
- Uso de obras cuya titularidad la ostente el propio usuario, advirtiendo de los derechos que pudieran ostentar terceros con los que se haya firmado un contrato de edición o un contrato discográfico.
- Contenido sobre el que se haya solicitado y obtenido autorización de uso
- Actuaciones hechas a partir de la aplicación creada por el propio servicio
Asimismo, Twitch concreta que no se podrá hacer uso en las emisiones y puestas a disposición de sesiones DJ, programas de música de estilo radiofónico, actuaciones de karaoke, playbacks, covers o versiones, y descripción visual de la música por ejemplo con partituras o letras.
Ante un incumplimiento, las medidas inmediatas adoptadas serán silenciar los directos en el momento que el software detecta un uso no autorizado o sin licencia, y la retirada de los videos puestos a disposición. Algunos de los vídeos que han sido retirados no son recientes, sino que fueron puestos a disposición en años anteriores, y hasta la fecha no se habían tomado medidas para impedir su uso.
*Foto: Caspar Camille Rubin, Unsplash